Quince días de amor, quince días
de vida, quince días de saber que estás en este mundo y abriste tus ojos a la
vida, quince días de saber que tus pulmones se llenaron de ese aire que rodea
este mundo tan lleno de misterio, quince días en los que tus pequeñas manos
tocaron la luz.
La vida nos presenta retos, nos
presenta muros donde chocar, nos presenta motivos para derramar lágrimas y
también nos da motivos para sonreír, y heme ahí al otro lado del muro
escuchándote llorar en los brazos de tu madre, con mi corazón contraído y mi
alma estrujada, con mis pensamientos arremolinados, y con mi vida a punto de
estallar por solo oírte y no mirarte.
- Tiene diez minutos dijo la
enfermera.
No puede ser eso no alcanza para
decirte cuanto te he esperado, no alcanza para decirte cuanto te amo, pero ahí
estas vuelto un enredo de mantas y un pequeño brazalete en tu manita y otro en
tu piecito que indican que eres mi hijo, yo quiero más tiempo mientras mis ojos
se pasean sobre tu rostro y sobre todo tu pequeño cuerpo, siento tus manos
calentitas sobre la mía tan robusta y masiva.
El tiempo pasó, y de vuelta en el
pasillo solo veo el recorrer del sol en cielo, solo escucho a las demás
familias decir felices que ya se llevan sus retoños, y viene a mi mente mi
pequeña que está en casa, hay mi pequeña guerrera mi dulce princesita, sin
recordar como hace un par de años yo estaba también con el corazón destrozado
afuera del hospital sabiendo que durante un mes estarías como hoy está tu
hermano.
Quince días de amor, quince días
de vida, de ese momento yacen quince días, quince días en los cuales mi pequeño
llego a casa, mi pequeña celebró sus dos añitos y mi corazón creció junto al de
mi esposa, esa mujer de alma inmortal que ha visto pasar por un túnel oscuro a
nuestros hijos, esa mujer que ha puesto a sus pequeños antes que ella, esa
mujer que me ha demostrado que es el verdadero amor, que me demostró cómo una
madre da su vida por sus hijos, y me demostró que el día que ella me dijo que
sí, yo me estaba volviendo en el hombre más rico del mundo.
Quince días de amor, quince días
de vida, quince días en los que descubrí dónde está mi fe, días en los que me
enamore mas de mi familia y en los que también grandes amigos no solo en casa
sino también fuera de ella, y fuera de las fronteras. Pensando positivo en la
tormenta me decía a mí mismo, pensando con amor en la oscuridad, con fe en el
dolor, con valor en la angustia, con esperanza en el llanto.
Quince días en los que Dios me
enseñó que las palabras escritas transmiten tanto apoyo como las habladas, días
en los que aprendí que mis pensamientos irán donde los dirija, dirán lo que les
diga, y harán lo que les mande. Quince días de amor, amor que nació del día en
el que supe que estabas ahí, amor que creció cuando pateaste mi mano desde lo
profundo del vientre de tu madre, amor que maduro al verte tras un monitor,
amor que se plantó al oír tu corazón.
Si bien la vida da motivos para
llorar, también los da para reír, si da motivos de estar triste nos sana con
grandes alegrías, hoy ya estás en casa y debo decirte que en estos quince días
me has demostrado que sigo siendo aquel padre que puede estar despierto hasta
las dos de la madrugada viendo que respires bien, que sigo siendo aquel padre
que puede dormir a un bebé en su pecho y sentirse un superhéroe pero sobre
todo, me enseñaste que mi corazón aún tenía mucho espacio para crecer y
albergar otra fuente de amor, encarnada en la figura de mi pequeño hijo,
encarnada en tu vida mi pequeño Gabriel.
Ohhhh. ¡Qué bonito! Enhorabuena por tu bebé y por tu maravillosa familia.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Gracias Sue, no hay mayor alegría para el corazón de un hombre, que llenarse los brazos con dos bellos hijos
EliminarPrecioso!
ResponderEliminarGracias Eva, un abrazo
EliminarUn texto que rebosa ternura y amor, los que tú sientes por tu familia, Anto. Mi enhorabuena por la llegada de ese nuevo miembro que os colma de felicidad a todos en casa.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo!!
Gracias Julia, es mi alegría tener a esta nueva vida a mi lado y sobre todo saber que lo podre proteger siempre con mi amor, mi familia es mi vida y vivo para ellos. Perdón por responder tan tarde y dejarte al último, no ha sido mi intención, te mando un fuerte y enorme abrazo envuelto en mucho cariño.
EliminarEnhorabuena por ese pequeño bebé y esa fortaleza que tenéis como padres. Se notatodo tu amor por tu familia.
ResponderEliminarUn besillo.
Gracias Maria, yo daria mi vida por mis tres regalos de Dios, mi esposa y mis hijos son mi mayor riqueza, un beso
EliminarFelicidades por tu nuevo hijo y acoger un nuevo ser que os dará mucha dicha y muchas preocupaciones, pero ahora solo tiene que crecer y vosotros protegerlo , Un abrazo
ResponderEliminarMuy cierto Maria, sera un viaje único, pero como Marco Polo lo recorrere con mi corazón al frente
EliminarEnhorabuena, Anto. Me alegra que tengas a esa nueva personita en tu vida, a Gabriel. Espero que la vida os depare a ti y a tu familia momentos maravillosos juntos.
ResponderEliminarEl texto es precioso, me ha emocionado muchísimo.
Un beso enorme, compañero.
Es mi alegria el saber que mi corazón esta completo Chari, no hay nada mas bello que sentir esa manita por primera vez. un beso enorme para ti tambien
EliminarAnto, precioso. Toda una aventura que acaba de comenzar. Mis mejores deseos para tu familia. Un abrazo!!
ResponderEliminarGracias Elena, tal como lo dices es una aventura que apenas empieza, pero que en el camino se ira escribiendo mucho más
EliminarDicen que el mayor objetivo en la vida es amar y el resto es silencio.
ResponderEliminarLo superas con creces y destila humanidad en cada letra.
Un saludo de luz ✴
Muchas gracias por tus palabras, antes que nada te pido disculpas por responder a tan larguísimo plazo, diferentes aspectos me han retenido este tiempo, un fuerte abrazo
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